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Playa del Carmen.- Desde al menos dos semanas, en redes sociales circulan toda clase de mensajes con supuestas denuncias de mujeres que alcanzan a escapar de ser secuestradas por hombres desconocidos en distintos vehículos. Sin embargo, hasta la fecha no existe ninguna denuncia por estos hechos ante la Fiscalía o siquiera una llamada al 911, además de comprobarse que varios, sino todos, de estas denuncias son falsas.
De la misma manera que hace algunos años se generó una histeria colectiva en varias partes de la Península, por unas supuestas camionetas blancas “robachicos” que secuestraban a niños (rumores falsos surgidos en redes sociales) ahora se genera histeria en redes con estos supuestos intentos de “levantón” de mujeres.
“Amigos y compañeros taxistas al igual que ustedes soy taxista quiero compartirles lo que pasamos hoy por la mañana se intentaron robar a mi hija de 19 años ella se dirigía a su trabajo un carro tipo aveo o attitu color gris son placas intento levantar la Gracias a personas que se encontraban en el camino no paso a mas ya que ella empezó a gritar y la auxiliaron” (sic). Este es solo uno de una serie de mensajes, todos sin la identidad de los involucrados, a menudo sin la ubicación del hecho, y ninguno con algún reporte con el C4 o una denuncia ante la Fiscalía General del Estado.
“Hola ayudame a compartir taxi 880 sin placas 3 tipos uno con gorra al frente y otro pelón en la parte trasera a plena luz del día sobre la Juárez intentaron subir a 2 chicas”, fue otro mensaje, compartido hoy en redes de WhatsApp.
Evidentemente, este último mensaje generó problemas para el operador de este taxi, quien fue interrogado por su sindicato, que comprobó que se trataba de un “fake news”.
Integrantes del sindicato “Lázaro Cárdenas del Río” tuvieron que subir un video en el que se ve que esta unidad sí cuenta con placas, y no se ha dedicado al levantamiento de ninguna persona.
Las supuestas camionetas robachicos sembraron pánico en varias comunidades mayas, en donde los ciudadanos se organizaban en brigadas, con las que amenazaban incluso con golpear a automovilistas inocentes que lucieran sospechosos. Por fortuna, nada así ocurrió, pero en Puebla el 25 de septiembre una abogada que acudía a visitar a sus hijos fue acusada sin pruebas de que intentaba robar a un niño, por lo que acabó linchada.
El riesgo de que alguien decida tomar justicia por su mano para frenar un falso “secuestro” de mujeres está latente.
