Cancún.- Si bien el paso del Huracán Delta por Quintana Roo dejó principalmente daños menores, una consecuencia inmediata fue la interrupción del suministro eléctrico en diversas partes de la ciudad, donde además fallaron los servicios de telefonía e internet.
Ciudadanos y empresas deben lidiar con el haber quedado incomunicados en cuanto a telefonía e informática, además de los daños esperados por el huracán, como cables caídos, basura vegetal, y algunas estructuras menores, como tinglados, derribadas.
Transitar a lo largo de la carretera federal 307, en el tramo al aeropuerto, resulta ser una aventura de riesgo, por la cantidad de cables caídos, postes a mitad de carril y anuncios espectaculares volteados.
Muchos árboles, algunos con décadas de vida, aparentemente llegaron al final de su existencia, aunque por ser en su mayoría desgajes, podrían ser recuperados.
Estos daños, sin embargo, se quedan muy cortos de las imágenes de Wilma que autoridades y ciudadanos anticipaban desde ayer.
De acuerdo al comunicado de la Comisión Federal de Electricidad, los daños a su infraestructura dejaron sin servicio a 266 mil usuarios en la Península de Yucatán, o 33% del total de la región. Ya comenzaron las labores de reparación.