Ciudad de México, a 17 de septiembre de 2020.- (Article19) Desde marzo a la fecha, policías municipales y de tránsito de Cancún han atacado, golpeado, amenazado e intimidado a Jorge Ugalde, reportero del medio digital Descontento Ciudadano Qr.
La última agresión se suscitó la madrugada del 16 de septiembre, cuando Ugalde fue víctima de detención arbitraria y amenazas contra la integridad por parte de policías municipales de Benito Juárez, Quintana Roo. La detención ocurrió alrededor de las 00:30 en un retén al que Jorge llegó con su esposa, para documentar que la policía aparentemente pretendía llevarse el auto de un ciudadano, quien extravió la tarjeta de circulación pero quien tenía la documentación requerida por la ley en caso de pérdida, incluida el documento con cita para reponer la tarjeta.
Jorge Ugalde detalló que cuando comenzó la trasmisión, los policías alumbraron con lámparas para evitar que se vieran sus rostros. En un video que Ugalde envió a ARTICLE 19, se observa como la policía se acercó al periodista y uno de los agentes dice “espósalo”. Así, el comunicador relató que durante su detención, los policías le quitaron y rompieron el teléfono y lo amenazaron:
“Los policías me apretaron fuertemente las esposas y me dijeron: ya sabemos donde está tu negocio y si no te calmas vamos ir contra él”
Momentos después, Jorge fue ingresado a una de las patrullas. Mientras eso sucedía, su esposa intentó grabar y los policías la amenazaron al decir: “Si sigues grabando te vamos a detener también, ya sabemos dónde viven”. Mientras tanto, en la patrulla, otros agentes preguntaron a Ugalde sobre su labor informativa: “por qué siempre tienes que estar comunicando a la sociedad lo que hace la policía”.
Jorge Ugalde estuvo retenido en la patrulla alrededor de 30 minutos y después los dejaron ir: El comunicador comentó a ARTICLE 19: “Y así nos dejaron ir, como si no hubiera pasado nada… y así es la violencia de la policía en Cancún”.
Cuatro días antes, en la madrugada del 12 septiembre, mientras transitaba por la Avenida Chac mool, la policía municipal intimidó a Jorge Ugalde al intentar ingresar ilegalmente a su automóvil. Todo ocurrió cuando Jorge fue detenido por una patrulla argumentando que su auto es polarizado (cuestión que es falsa). Así, cuando Jorge detuvo el auto, un oficial le preguntó a dónde iba y quién era. En esos momentos, por el lado del copiloto, otro oficial abrió la puerta e intentó ingresar al auto. Al instante, Ugalde grabó la intimidación del oficial. Después de unos minutos lo dejaron ir, no sin antes anotar el número de placas y fotografiar el automóvil.
Un mes y medio antes, Jorge Ugalde fue víctima de intimidación por parte de policías de tránsito quienes «le aventaron una patrulla» y golpearon el auto del comunicador. La intimidación ocurrió al momento que Ugalde reportaba la aparente detención de un ciudadano afuera de una tienda Oxxo. Durante los hechos, Ugalde relató a ARTICLE 19 que un policía subió al auto del ciudadano y arrancaron, por lo que él los siguió para continuar la cobertura. Después de varios minutos, casi al llegar a las instalaciones de Seguridad Pública, Ugalde rebasó a uno de los autos para mostrar que era un policía quien manejaba el carro del ciudadano y en esos momentos fue que una patrulla tipo pick up chocó el auto del periodista causando daños al mismo.
En entrevista con ARTICLE 19 Jorge dijo: “Hable al 911, poco después llegó un perito de tránsito y me dieron una hoja de reparación de daño. “El ataque contra mi auto fue intencional, por estar documentando lo que hace la policía de Cancún, por eso no nos quieren.”
La violencia contra Jorge Ugalde por parte de la policía municipal de Cancún se remonta a marzo de este año, cuando fue detenido arbitrariamente, golpeado, amenazado y obligado a firmar un documento a cambio de su libertad.
Las agresiones arriba descritas ocurrieron la noche del 14 de marzo, luego de que Ugalde decidió brindar a sus comensales el servicio de transporte, para evitar que la policía de tránsito y municipal pudieran detener a los clientes posterior a haber ingerido alimentos y bebidas en el restaurante-bar propiedad de Jorge y su esposa.
Como consecuencia, agentes de la policía lo sometieron, tiraron al suelo y lo golpearon. Posteriormente, lo llevaron a los patios de Seguridad Pública donde nuevamente lo golpearon y en un baño, lo obligaron a limpiarse la sangre para después llevarlo a las instalaciones del Centro de Detención Municipal conocido como el Torito.
Una vez en el Torito, un médico legista le dijo al periodista que no podía ingresarlo debido a los golpes recibidos y que debía ir al hospital de inmediato. Por ello, uno de los policías de tránsito lo amenazó y le dijo: “si no firmas este documento te voy a llevar al Ministerio Público por robo”. Jorge asustado firmó dicho documento, cuyo contenido lo hacia responsable de la perdida de un radio, por lo que tuvo que dar 2,300 pesos al policía.
Tres días después, Jorge presentó una denuncia ante Asuntos Internos de la Secretaria de Seguridad Pública y una queja ante la Comisión de Derechos Humanos Estatal, sin que a la fecha se tengan avances.
Si bien la agresión de marzo no tiene vínculo con la labor informativa de Jorge pues no cubría ningún tipo de nota, si muestra la impunidad y ausencia de mecanismos que prevengan y pongan fin a la violencia policial en Cancún, Quintana Roo.
El abuso policial de las corporaciones de Benito Juárez, Quintana Roo contra integrantes del medio Descontento Ciudadano Qr no es nueva. Desde 2019 a la fecha ARTICLE 19 documentó 7 agresiones contra integrantes del medio, incluida la detención y tortura contra Raúl Fernández, director del medio.
El 26 de junio ARTICLE 19 publicó una alerta sobre la detención arbitraria y amenazas de muerte contra Raúl Fernández, director del medio Descontento Ciudadano Qr, perpetradas por la policía municipal. Cuatro días después, el 30 de junio ARTICLE 19 exhortó a la Policía de Benito Juárez, Quintana Roo y a la Secretaria de Seguridad Pública a conducirse bajo los más altos estándares de protección de derechos a la libertad, integridad, seguridad, no ser torturado y a la libertad de expresión.
La violencia contra Jorge Ugalde se enmarca en un contexto de fuerte represión contra la prensa en Quintana Roo. En el primer semestre de 2020, ARTICLE 19 registró 24 ataques contra periodistas en la entidad, mientras que en 2019 documentó un total de 57 agresiones contra periodistas. Esto coloca a Quintana Roo como uno de los cinco estados más peligrosos para ejercer el periodismo. Dentro de los ataques y agresiones más frecuentes están supuestos casos de tortura por parte de elementos policiales, detenciones arbitrarias y amenazas.
Por lo anterior, ARTICLE 19:
Exige a la Secretaría Municipal de Seguridad Pública y Tránsito de Benito Juárez abrir una investigación interna por lo que hace a la responsabilidad administrativa de los elementos que participaron en las agresiones cometidas contra Jorge Ugalde y sancionarles según corresponda. Asimismo se les conmina a abstenerse de represalias y acciones que restrinjan el ejercicio periodístico y la libertad de expresión de Ugalde y de cualquier otra persona integrante del medio Descontento Ciudadano Qr.
Llama a la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Quintana Roo dar seguimiento al caso de Jorge Ugalde con el fin de emitir medidas cautelares que prevengan más ataques contra su integridad y su labor. Así como, que desde sus facultades combata a la impunidad de los ataques contra la prensa en la entidad.
Solicita a la Fiscalía Especial para Atender Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) atraer las denuncias presentadas por Jorge Ugalde de manera pronta y diligente, en concordancia el Protocolo Homologado para Investigar Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión para garantizar el derecho al acceso a la justicia de la víctima.
Llama también al Mecanismo de Protección de personas defensoras de derechos humanos y periodistas incorpore prontamente a Jorge Ugalde a fin de analizar su riesgo en armonía con el riesgo de Descontento Ciudadano Qr, a fin de brindar planes de protección para él y su familia.