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Cancún.- Dos repartidores de garrafones de agua de Bepensa tenían un acuerdo con un almacenista de una tienda en la Supermanzana 35, para cobrar por producto que no entregaban; sin embargo, el propietario se dio cuenta y hoy los tres ya fueron detenidos.
Buenaventura, de 34 años de edad, y Juan, de 40 años, eran dos trabajadores de Bepensa, dedicados a la venta de garrafones de agua; sin embargo, al llegar a una tienda en la Supermanzana 35, entregaron 16 garrafones al almacenista, Marco, de 22 años, pero le entregaron una nota en la que se les cobraba 30 garrafones.
Se trataba de un acuerdo que tenían con este empleado; sin embargo, el propietario ya sospechaba de irregularidades y por eso había alertado al supervisor de seguridad, quien procedió a hacer un conteo del producto entregado.
Al ver que las cifras no cuadraban, comenzó a interrogar al almacenista, quien solo balbuceó que no se había percatado de que la nota decía 30 garrafones, cuando sólo le entregaron 16. El supervisor no creyó tanta ingenuidad, en especial al revisar el histórico de las entregas y ver que se trataba de un estafa que ocurría hacía mucho, siempre con el mismo almacenista y los mismos repartidores.
Por ello, se llamó a la policía, acudiendo al lugar agentes Municipales, quienes procedieron a detener a los tres involucrados; los empleados de Bepensa por fraude, y el almacenista por abuso de confianza.
