Cancún.- Los padres y madres de un grupo de 25 niños con discapacidad que terminan su secundaria y que pronto requerirán educación media superior, se manifestaron en exigencia de una preparatoria de educación especial, pues solo se cuenta con una modalidad abierta, con exámenes en línea. En respuesta, la Secretaría de Educación de Quintana Roo afirmaron que no es viable, aunque se trabajará en fortalecer el esquema actual.
Gabriela Plascencia Montaño, madre de un menor con discapacidad, indicó que ya acudieron a las tres opciones con las que cuentan actualmente sus retoños, dos Centros de Atención a Estudiantes con Discapacidad (CAED), así como una escuela normal, pero incluyente, el CETMAR 41, pero constataron que las dos primeras son solo centros de asesoría para educación modular, no escolarizada, en tanto que el otro solo tiene rampas de acceso, pero sus salones están todos en segundo o tercer nivel, con escaleras, sin tener equipo especializado.
Por ello el 14 de febrero se le envió una carta a las autoridades educativas para la creación de una escuela de nivel preparatorio de educación especial, lo que podría hacerse en el CAM laboral, que es donde acuden por talleres, faltando solo que se le añada lo educativo; sin embargo, ya recibieron una negativa, al señalarles que esas son las únicas opciones con las que cuentan.
En los CAED solo se brinda atención a gente con discapacidad intelectual, pues no hay audiolibros ni lenguaje de señas, se quejó. Al ser sistema abierto, toca a los padres educar a sus menores, algo que no siempre es posible, pues carecen del conocimiento necesario. Lo más grave, expresó, es que los exámenes se hacen en computadora, para enviarse a la Ciudad de México, sin adecuaciones para discapacitados, lo que es una incongruencia.
Lo que ellos solicitan es una educación escolarizada, con maestros que los instruyan y puedan realizar los exámenes y que entreguen un certificado con reconocimiento oficial, para aquellos que puedan continuar su educación.
“Ellos son parte de la sociedad y merecen seguir su educación, deben poder leer, trabajar”, aseveró la madre de familia.
A los 25 alumnos que terminan su secundaria, ya se están sumando los más de 60 alumnos actualmente en los CAED, lo que significa 80 menores que solicitan una preparatoria para estudiar.
NO ES VIABLE
Por separado, Carlos Gorocica Moreno, subsecretario de Educación en la zona norte, afirmó que es “imposible” crear una escuela preparatoria de educación especial, pues no se tiene el recurso para ello, además de ser una modalidad que no existe en ningún lado y porque ya están los CAED, que va acorde al esquema de inclusión marcado en la ley.
El funcionario dijo que tienen toda la disposición para apoyar a estos jóvenes, pero en los CAED, en donde hay que enfocar esfuerzos para mejorarla.
Aceptó que es necesario reforzar estos centros, en parte justificando al indicar que es un esquema federal que a menudo escapa de sus manos, aunque también aclarando que no se están deslindando del tema.
Lamentó que esta “papa caliente”, de orden federal, les reviente a los Servicios de Educación, añadiendo que ante las exigencias, ya sumaron a un maestro en lenguaje de señas.
Recalcó que quienes exigen preparatoria para sus hijos tienen el CAED a su alcance, y que pueden sentarse a discutir con ellos cómo mejorarlos, pero no será fructífero si insisten en contar con una preparatoria, pues eso es inviable.
“Dentro de lo deseable, hay que ver lo viable y realizable. Estamos en la mejor disposición, de que a través e este esquema, dirijamos proyectos y la posiblidad para que allí estudien”, comentó.