Chetumal.- En una ceremonia llena de emoción y alegría, cinco niños quintanarroenses, acompañados de sus familias, tocaron una campana, para simbolizar que ya están libres de cáncer, aunque continuarán realizándose vigilancia cada mes.
“Cuando mi niño empezó tenía dos años; yo no creí que lo fuera a lograr, pero lo puse en las manos de Dios. Cuando estuve en el hospital esperando los resultados de qué tipo de leucemia tenía, yo le pedí a Dios que me mostrara si iba a estar bien, y efectivamente Dio s me mostró en un sueño a mi niño que se levantaba de la cama, tomaba mi mano y la puerta de la habitación se abría y salíamos. Yo lo tomé como que lo lográbamos, y aquí está conmigo. Hemos pasado por muchas cosas, pero él está bien y una sonrisa suya es muchísimo… son sentimientos que a lo mejor no se pueden explicar”, narró al borde de las lágrimas una de las madres que participaron en esta ceremonia en la Clínica del Niño y Adolescente con Cáncer, donde se atienden a 50 menores, con una tasa de éxito de un 62%.
Asunción Encarnación Jiménez, hematóloga pediatra encargada de esta clínica, indicó que esta es la tercera ceremonia del año, pues ya antes seis otros niños fueron declarados libres de cáncer, proceso que toma en promedio tres años.
Uno de los pequeños debió ser enviado a Monterrey, donde estuvo ocho meses internado, para recibir un trasplante de médula.
A nivel nacional, se estima que hay 122 casos de leucemia por cada 100 mil niños. En Quintana Roo es difícil cuantificar esto, ya que muchos pequeños son enviados a atenderse en otros estados, pero tan solo este año recibieron 20 nuevos pacientes.
“Hemos sufrido por el desabasto de medicamentos, que es un problema nacional, pero ninguno se quedó sin quimioterapia, por apoyo del Gobierno del Estado y otras instituciones”, comentó la doctora. “En algunos casos se tuvo que comprar medicamento en Estados Unidos, pero a nadie le faltó la quimioterapia”.