Chetumal.- Un joven de nombre Alberto Francisco, que tienen una deformación congénita de tórax y vive en la comunidad “Pedro Joaquín Coldwell” del municipio de Othón P. Blanco, denunció la falta de interés por parte de los doctores del CRIT de Cancún, pues le niegan un diagnóstico que le urge para realizar unos trámites y recibir apoyo para su operación que tiene un costo de 200 mil pesos.
El padecimiento que tiene esta persona es clínicamente conocido como “pectus carinatum”, que es una malformación genética en el pecho, donde la pared torácica sobresale hacia fuera, esto ocurre debido a un crecimiento anómalo de las costillas y del cartílago del esternón. Esta protrusión (proyección hacia delante) hace que el pecho parezca el de un ave, motivo por el cual esta afección también se denomina como «pecho de paloma».
“Yo me anoté en programa discapacidad, pero me están pidiendo un certificado de discapacidad, ayer fui a cita al Crit me dicen que no es discapacidad, que es mínimo; que lo que pueden hacer es brindar apoyo en terapias, siendo que yo puedo trabajar en el campo y si tiene cura mi deformación, pero están pidiendo una toracoplastia que me sale casi 200 mil pesos”, narra el joven campesino.
Se pregunta de dónde quieren las autoridades que consiga el dinero, si no puede trabajar para juntarlo, de ahí que solicita la intervención de las autoridades de salud para que atiendan su caso, ya que al recuperarse está dispuesto a trabajar para devolverlo.
En algunos casos, el pectus carinatum se puede tratar mediante cirugía. En el procedimiento de Ravitch, un cirujano extrae el cartílago dañado, corrige o reconstruye la forma del esternón y coloca una barra (o varias barras) en la pared torácica para sostenerla en la posición adecuada. La barra se suele extraer en una operación posterior, generalmente al cabo de unos 6 meses. Esta operación se suele hacer en pacientes de 13 a 22 años de edad.
Los médicos también pueden recomendar fisioterapia y ejercicios para fortalecer los músculos débiles del pecho.