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Chetumal.- Aunque se está en proceso de transformación hacia un Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, que atenderá de forma centralizada a los hoy afiliados al Seguro Popular, este programa no se suspenderá, quedando así garantizada la atención para sus 600 mil afiliados en el estado.
Ana Gabriela Sosa Guerra, directora general del Seguro Popular, indicó que actualmente el Gobierno Federal libera los recursos a los estados, para la atención de estos pacientes, lo que cambiará con la creación del Instituto Nacional de la Salud para el Bienestar, el que todavía está a consideración de la Cámara de Diputados y que se estima entraría en vigor en dos años.
Sin embargo, ya la entrega de medicamentos ha sido centralizada, de forma que llegan en especie directamente a los hospitales donde se requieran, en lugar de liberarse el pago para su compra hacia los estados.
A nivel nacional, hay 54 millones de mexicanos afiliados al Seguro Popular, cuyo cambio a este nuevo esquema será “un reto muy importante” comentó la funcionaria.
Según explicó Sosa Guerra, el gobernador Carlos Joaquín González ha solicitado que siempre exista continuidad en este programa, por lo que se descartó que se genera alguna “brecha” entre la desaparición de un programa y creación del nuevo.
También aseveró que desde 2016 se ha saneado el padrón en el estado, de forma que solo están incluidos quienes carecen de otra seguridad social, siendo actualizado cada mes.
