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Cancún.- Luego de que la justicia argentina solicitara a Interpol la captura de Raúl Martins, ex espía de ese país acusado de trata y quien reside en Cancún, se detectó que, debido al acuerdo firmado entre la nación sudamericana y México en 2010, esta extradición debía solicitarse por la vía diplomática. Por ello, la Cancillería argentina se ha puesto en contacto con su contraparte mexicana.
«No se concederá la extradición si la persona reclamada ha sido sometida a proceso o ha sido juzgada y condenada o absuelta por la Parte Requerida por los mismos hechos que originaron la solicitud de extradición”, reza el artículo 4 del tratado de extradición de ambas naciones. Esto podría ser usado por la defensa del ex espía para evitar que enfrente a la justicia en su país, según advirtió el periódico argentino El Clarín.
Fue el 3 de septiembre cuando una juez pidió a la Interpol la captura del residente en Cancún, Quintana Roo para que enfrentara en Argentina los señalamientos en su contra; se le acusa de ser el jefe de una red de trata y explotación de mujeres, lo que ocurría en los centros nocturnos de los que es propietario tanto en Buenos Aires, capital argentina, como en la zona hotelera de Cancún.
PODRÍA HABERSE NACIONALIZADO
De acuerdo con lo expuesto por este medio porteño, la petición argentina ya habría salido hace una semana. Se espera la respuesta de la diplomacia mexicana para saber si harán caso o no a dicha petición.
Hubo una investigación en México contra Martins precisamente por estas mismas acusaciones. Hay quienes incluso denuncian desde Argentina que hubo poco interés de parte de la justicia mexicana en el caso. Y que este proceso es la mejor oportunidad que tiene Martins para evitar presentarse ante la jueza que pide su extradición.
Por si fuera poco, podría haber otra complicación y es que Martins haya completado el trámite de nacionalización, lo que ya incluso hicieron su pareja y algunos familiares de ella; según el mismo acuerdo entre ambas naciones, una doble nacionalidad crearía otro obstáculo en el proceso.
Cabe destacar que Martins vive en Cancún desde 2003.
