Chetumal, 29 de Enero.- se genera incertidumbre en el Estado ante la falta de registros de empresas de seguridad privadas.
De 181 empresas de seguridad privada que se encuentran en el padrón de la Secretaria de Seguridad Publica de Quintana Roo solo 19 se encuentran activas, las 161 restantes operan de manera ilegal porque sus permisos fenecieron el último día del año pasado.
La Dirección de Registro y Supervisión a Empresas de Seguridad Privada ha negado la revalidación.
Esto se debe a que el secretario estatal de Seguridad Pública, Jesús Alberto Capella Ibarra, pretende enviar al Congreso del Estado, una iniciativa para reformar la Ley de Seguridad Privada de Quintana Roo, para equiparle a la del Estado de Morelos, que impondría fianza de 400 mil pesos para revalidar sus permisos, de manera que sera en año calendario de acuerdo a la aprobación de la Secretaria de hacienda, mismo que podría tardar tiempo.
La directora de Registro y Supervisión a Empresas de Seguridad Privada, Bárbara Nashely del Rasso Sayago fue instruida para operar tal disposición, misma que a tenido una actitud negativa y prepotente ante los empresarios.
La intención generó inconformidad entre los empresarios de este rubro, de tal forma que no han podido licitar para prestar sus servicios de seguridad privada, lo que no a generado ganancias estos últimos meses.
No omito mencionar que a todos los empresarios se les exigió en las primeras fechas del mes de noviembre justo cuando la Directora de Registro y Supervisión a empresas privadas tomara el cargo, la aportación de regalos electrodomésticos para la celebración del Día del Policía, sin embargo, los muebles y electrodomésticos donados fueron para acondicionar su departamento.
De las empresas que operan de manera irregular, 115 son de Cancún, 18 se ubican en Playa del Carmen, 16 en Chetumal, 10 en Cozumel, dos en Puerto Morelos y una en Tulum.
Esto genera inseguridad e insetidumbre en el Estado.
Y no debe perderse de vista que en un hotel de Playa del Carmen se registró el caso de un ataque sexual a una turista de parte de personal de seguridad no identificado.