Por Pedro Canché
Puerto Aventuras, Sección Campamento. El pueblo campamento de Puerto Aventuras recibe unos intensos rayos del sol. Si uno asoma por la ventana del segundo piso ahí está el mar turquesa, visible. Uno envidiaría a los portoventurenses. Pero uno se equivoca. El pueblo no tiene acceso al mar. La marina de Puerto Aventuras, saturada de lujosos condominios y casas, valuadas en 200 mil dólares el más barato, es la cara elitista de esta moneda egoísta. Yates de los Estados Unidos anclan en los canales fabricados justamente frente a los condominios. No hay ferraris como en Dubaí. Sin embargo hay cantidad de yates anclados con fiestas interminables de turistas en la gozadera. Este acceso está vedado para el portoaventurense. Solamente si viste de jardinero, mesero o trae su gafete de hotel puede pasar. De lo contrario ni un paso. Apelan que es una marina privada. Cualquier visitante tiene que dejar su identificación oficial con los guardias. Aún si uno entra a almorzar en los restaurantes de la marina.
Para este pueblo es normal la segregación. No protestan. Están domesticados. No así Orlando Cox (hermano de Alfonso Cox Tun, un periodista fallecido) y Adrián González. Aprovechan que el gobernador visita por primera vez este pueblo caribeño sin caribe para desplegar una manta. Carlos Joaquín ha inaugurado una biblioteca construida en tres meses con una inversión de 3 millones y medio por parte del gobierno de Solidaridad que encabeza Cristina Torres. El gobernador atiende a ciudadanos que se acercan tímidos para que los apoye con becas, viviendas y trámites burocráticos. En la calle Ciricote y Chechén, bajo un frondoso árbol de hule playero que da sombra a los anfitriones, Carlos Joaquín mira de reojo a los dos manifestantes. Su cuerpo de seguridad realiza los protocolos necesarios sin molestar a Cox y González.
-¿Algo quieren decir los señores?- y les hace una señal. Dos señoras lo toman del brazo y les plantean unos problemas de salud. Necesitan a su gobernador.
Alexis es un niño de 5 años al que le pregunto a que playa va a nadar.
-A la Quinta avenida de Playa del Carmen
Tiene razón. Los pobladores prefieren ir a 22 kilómetros. En Playa del Carmen en la Quinta Avenida está a 50 metros el hermoso mar. Lo tienen ellos a 900 metros acá en su pueblo,pero inaccsesible. En el centro deportivo del pueblo la alcaldesa Cristina Torres les construyó una gran alberca. Para 15 mil pobladores no es suficiente. Paradógico si además tienen la playa a tiro de piedra.
En tiempos de Félix González Canto y Roberto Borge llevar una manta para protestar era suicida. Los pocos que se atrevieron fueron golpeados y echados del Estado.
¿Qué hará el gobernador? Los policías acostumbrados a recibir órdenes para atacar a los manifestantes se encuentran a la expectativa.
-Yo también estoy de acuerdo con ustedes – dice Carlos Joaquín señalando la manta con la leyenda «Ya basta!, Justicia ya! Art. 27 Const. Las Playas son de todos. Defendiendo mis derechos, defiendo mi dignidad».
-Ahí lo que hay que hacer- continuó- lo que estamos haciendo, es revisar todo el programa del plan director de desarrollo urbano. Con pasos firmes y sonriendo se ha acercado el gobernador al par de valientes. Están nerviosos. No es fácil manifestarse. Pero no está Borge.
¿Dónde quedaron las entradas? Hay que averiguarlo y llevarlo a juicio, porque si no saben es un tema de juicio, y también ver el origen federal, por la llegada a la zona de playa, absolutamente de acuerdo con ustedes, y estoy trabajando en que se abra.
-Señor Gobernador en el caso que… ¿se abra?. Buenas tardes, Señor gobernador. Estamos un poquito nerviosos. Por la situación en la que estamos. Pero nuestra lucha es constante tenemos 5 años, aquí la señora presidenta, sabe también, no nos han dado respuesta. Ni siquiera ha tenido la amabilidad de decirnos, no se la vamos a dar, dice Cox muy sincero.
– Hay que verlo en el PDU. Cómo están ubicados…
– Hay 4 puntos destinados para Puerto Ventura. Hay uno en particular, y lo que hemos visto es falta de voluntad, de parte de las autoridades, yo lo puedo decir porque se han hecho 5 mesas de trabajo, desde el año pasado que se creó con unos regidores, y lo único que hemos visto es…
– No se en el municipio, pero en el estado, estoy trabajando con 32 aperturas, que están ubicadas en el PDU, de manera jurídica, como se deben.
– Que no se olviden que en Puerto Ventura, tenemos derecho a disfrutar de nuestras playas, somos pueblo, tenemos años viviendo aquí, lo único que queremos que no nos sigan marginando, que no nos sigan viendo como delincuentes para pasar a la playa, es injusto.
– Se hace por la vía jurídica. No ha gritos, y no con mantas, hay que trabajar de forma jurídicamente si no, no te dan el acceso a la playa, se llama, servidumbre de paso; cuando yo fui presidente municipal abrimos cerca de 25, después llegaron otros presidentes y los cerraron, y ahora desde que llegué, he estado trabajando en la apertura de 32.
-Señor Gobernador, tengo fe que el cambio sea efectivo, y contamos con su palabra.
– Con mucho gusto, y me uno a su solicitud.
– Gracias.
Acto seguido se acercó al vehículo oficial para dirigirse a inaugurar otra obra en el pueblo
Le pregunto a Orlando Cox, ¿ya estás convencido?
-Hasta no ver no creer como dijo San Tomás