POR BASILIO AREVALO.- Los tablones de la guayabera blanca en algodón-lino que el senador priista Félix González Canto viste, se acomodan secuencialmente luego del altercado que sostuvo con el otro político isleño, Julián Ricalde Magaña, ex presidente municipal de Benito Juárez y hoy secretario del gabinete de Carlos Joaquín González.
La fina prenda de vestir, que es el traje de gala en la península yucateca, luce acomodándose impecablemente en la fotografía filtrada justo en el momento en que el ex gobernador de Quintana Roo y “maestro” de Roberto Borge Angulo huye asistido por su operadora financiera en la zona sur del estado, Laury Cruz Vargas, quien intenta apaciguar la respiración de su empleador al tiempo que lo retira del recinto en improvisado en bochornoso cuadrilátero.
Ni Félix ni Julián ingresaron al evento ofrecido este domingo 8 de octubre, en Chetumal, a propósito del aniversario 43 de Quintana Roo. La fotografía muestra a Julián Ricalde recogiendo del suelo algún accesorio personal, mientras es auxiliado por otra persona. Al fondo de los protagonistas aparecen el presidente municipal de Benito Juárez, Remberto Estrada Barba, del Partido Verde; y otros dos secretarios de la administración de Carlos Joaquín: Pedro Pérez Díaz, ex alcalde priista del municipio de José María Morelos, candidato del Partido Encuentro Social (PES) y Joel Espinoza Moreno, del PAN, subsecretario de Gobierno actual.
Desde hace 10 meses Félix opera una plataforma sincronizada multimedia en redes sociales, con más de 2 mil seguidores y que ya fue identificada como una mafia cibernética que lo mismo espía a periodistas o persona non-gratas a los objetivos del senador, que a hilar un fino embaucamiento a la masa central del electorado: jóvenes. Esa plataforma es la que controla Laury Cruz Vargas.
En Quintana Roo, tras exhibirse la descomunal maquinaria para medrar con dinero público que significan el felixismo y el borgismo, hay una sociedad que está harta de tanta podredumbre y que cada día, con mayor fuerza, eleva su voz de protesta.
Julián Javier Ricalde Magaña es un líder genuino surgido de la oposición en Quintana Roo. En marzo de 2016 se le clasificó como la esperanza para impedir que el PVEM se apoderara del municipio de Benito Juárez donde se alberga la ciudad turística de Cancún. La llamada Joya de la Corona de los 11 municipios de la entidad. Julián se registró como precandidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para esa posición, de toral importancia por ser el principal polo turístico donde habita más del 50% de los votantes quintanarroenses.
Meses atrás, producto de una guerra gestada durante su administración como edil de Cancún y vislumbrada la posibilidad de que volvería a competir por el mismo cargo en un ambiente donde se codearía con otro ex alcalde, Gregorio Sánchez Martínez, ahora franquiciatario del PES; Ricalde venía siendo blanco de furibundos obuses que incluyeron denuestos de toda índole y hasta amenazas personales.
En uno de los pocos eventos públicos a los que coincidieron Roberto Borge y Ricalde una vez declarada la guerra –el primero como gobernador del PRI interesado en dinero federal que le solicitaría al ex presidente panista del país, Felipe Calderón, y el segundo, gobernante municipal en un ayuntamiento millonario, presuntuoso de gozar amistad personal con el Ejecutivo federal que Borge enamoraba—el propio Julián Ricalde me respondió a dos preguntas incisivas que le hice mientras esperaban que llegara Borge al salón del hotel Fiesta Americana Cancún, donde tomaría protesta Roberto Cintrón (+) como dirigente de hoteleros.
–Hay una guerra frontal entre usted que es del PRD; su hermana Alicia, del PAN y el priista Roberto Borge…
Nosotros defendemos la justicia y el gobierno que es obligación ejercer de buena forma. El PRI es una herencia corrupta y no sólo Quintana Roo, mira el país como lo han dejado en donde han sido gobierno.
–Ahora que Felipe Calderón es presidente de México, él es amigo de ustedes, ¿cambiará algo de lo que heredó el PRI?
Él está haciendo su tarea. No es una persona que se rinda. Es el primer interesado en tumbar la corrupción.
–Usted y el gobernador Borge eran amigos ¿o no sería mejor que volvieran a ser amigos? Sus madres –con todo respeto- son amigas; ustedes son isleños ¿qué fue lo que pasó?
Roberto tiene un maestro y es un maestro corrupto y perverso.
-¿A quién se refiere usted?
Félix.
Los siguientes momentos Ricalde hizo intenciones directas de señalar que el responsable de los ataques eran Félix González ordenándole a Roberto Borge. “Formaron una dupla siniestra, son agresores acalambrados pero muy perversos”, finalizó.
Nativo de Isla Mujeres, Julián no se ha vendido como otros integrantes de una oposición que fue cooptada por Félix González durante años. En 2010, Félix también se auxilió del golpeteo político con el que intentó evitar la llegada de Ricalde a la silla municipal de Benito Juárez. Experimentado, pero impetuoso, Ricalde fue visto por la oposición el año pasado como un personaje indispensable para echar al PRI de Quintana Roo que venía gobernando ininterrumpidamente desde 1975.
En septiembre de 2013, Reporte Índigo exhibió a Félix González, como delegado del PRI nacional en Nuevo León, un delegado con propiedades en Miami Florida donde abrió una empresa, Ener Investment Corp en sociedad con Ricardo Javier Gamboa García. Cita el reportaje: “La compañía está registrada con el domicilio 7771 NW41ST en Hollywood, una población de veraneo muy cerca hacia el norte de Miami Beach. El ex mandatario quintanarroense tiene socios beneficiados con obra pública en Yucatán durante el gobierno de su amiga Ivonne Ortega Pacheco”.
Las familias de los Ricalde y los González operan transportes marítimos. Ese fue uno de los enconos que aumentaron la rivalidad entre ambos, gracias a la rapacidad descomunal de Borge con la creación de Barcos Caribe. El felixismo y el borgismo sextuplicaron la deuda pública en los 12 años de gobierno que estuvieron en la gubernatura. Gracias a esta dupla perversa, de dos mil pesos en 2008 que cada quintanarroense debíamos pasó a casi 14 mil pesos ¡hasta 2014! Y sí, en efecto, los años en los que la deuda crece es en tiempos electorales.
Félix González concluirá su gestión legislativa en Senado en agosto de 2018. Para no pocos, ni Félix ni Borge estarán en su estado natal sino hasta después de 2022, cuando el Gobierno de Carlos Joaquín, su paisano, concluya.