Hoy más que nunca, Graco, Morelos se encuentra sometido en un lacerante clima de inseguridad, en el que los criminales ganan las calles y los espacios públicos, mientras los ciudadanos vivimos encerrados; convivimos en secreto, porque ya no celebramos, ya no disfrutamos de nuestra ciudad y de nuestro estado, corremos el riesgo permanente de que nuestras reuniones sean tachadas como encuentros para conspirar.
Día a día la capacidad de sorpresa se agota y, en la misma medida, los miedos que nos atrapan se multiplican. Hoy tenemos miedo a ser asaltados; a perder nuestras pertenencias a manos de ladrones; a ser víctimas de un secuestro, de un levantón. Lo peor de todo, tenemos pánico a cruzarnos en el camino de alguna patrulla, de algún elemento de esamasa amorfa policiaca que hoy por imposición tuya, se denomina Mando Único.
Han pasado casi 4 años desde que inició esta larga noche de terror, misma que arrancó junto con los desaciertos y ocurrencias de tu gobierno, a la par con tu voraz e insaciable apetito de dinero ajeno; de recursos propiedad de todos los morelenses, con los que te has enriquecido hasta la locura.
Graco, ese 1 de octubre de 2012, presagiaba que nada bueno podíamos esperar en Morelos, porque fue el momento de tu ascenso al poder.
Espero que alcances a entender, algo difícil para alguien de tu clase, de tu calaña, que no puedo llamarte gobernador, porque la titularidad del Poder Ejecutivo Estatal, se gana en las urnas; se mantiene en los hechos y se sostiene con el respeto y el respaldo popular, valiosísimos ingredientes que tú perdiste casi tan pronto como asumiste el cargo.
Y perdiste el respaldo popular, porque tu triunfo se dio condiciones de dudosa transparencia; en medio de unclima electoral de opacidad, como todo lo que has hecho en Morelos; en esta tierra por la que no sientes nada, más que la ambición desmedida por saquear y lastimar a quienes aquí nacimos o, por decisión propia, nos hicimos parte de esta generosa geografía.
Ayer Graco miré con sorpresa y escuché avergonzado el hilván de mentiras y denostaciones, contra aquellos que has hecho tus adversarios, porque así conviene a tus intereses personalísimos, que fuiste a verter a estaciones de radio y televisión, a cuyas empresas ocupas y desechas como si se tratara de papel sanitario.
Ayer Graco confirmé que padeces de tus facultades, que eres un psicópata, un trastornado mental que a conveniencia, se evade de la realidad y se interna en su zona de confort, en el laberinto de sus mentiras; confirmé también que lo tuyo es el escupitajo al cielo, la difamación ramplona y la amenaza cobarde, pero también la descalificación sin sustento y sin documentar, como no has documentado; no has soportado ninguna de tus acciones, la mayoría de ellas atracos en despoblado en agravio del tesoro de los morelenses.
En tu recorrido por estaciones de radio y televisión de la entidad, cuyas facturas pagas con dinero del pueblo que trabaja y produce, mientras tú simulas y saqueas; agredes y corrompes; te alabas y difamas, no hiciste otra cosa que confirmar lo que todos en Morelos sabemos, tu incluido, los morelenses te rechazamos; ya no soportamos tu evasiva estancia en nuestra tierra.
El juicio popular, la voz del pueblo (que es la voz de Dios), te escupió a la cara su rechazo; ocupó la que hoy constituye su mejor arma: las redes sociales, el Facebook en especial, para recordarte que eres un vulgar ladrón, cómplice de criminales, irresponsable y extraviado en un estado que no es el tuyo, ni tuyo, al que nunca has pertenecido, el mismo que te rechaza y sabe que esta larga noche está a punto de terminar, porque tú ya ocasional presencia en Morelos, es ya insostenible, incluso para Miguel Ángel Osorio Chong, el Secretario de Gobernación, quien se aferra a mantenerte en un cargo que ya abandonaste de facto en manos de tu hijastro, el ladrón, vengativo y traicioneroRodrigo Gayosso Cepeda.
No Graco los temas de tu agenda, no son los temas de la agenda de los morelenses, mientras tú sostienes a rajatabla al Mando Único, los morelenses lo rechazamos, por estar plagado de delincuentes y ser cómplice de peligrosos grupos criminales. En su interior, y se ha comprobado, habitan peligrosos abusadores sexuales, cobardes violadores.
El asunto de la Beca Salario, porque según para ti la educación no es un gasto, sino una inversión, pero inversión personal, porque se ha convertido en un instrumento tramposo y electorero, del que se entrega una vez y se reporta tres o cuatro, por eso los recursos llegados de la federación para ese fin, difícilmente podrías comprobarlos.
El tema de la salud en Morelos, con todo y los aplausos pagados, resultado de la componenda con funcionarios corruptos, tanto o más que tú, es un asunto en crisis, en el que se emplean, cuando los hay, medicamentos caducados y equipos de quinta, cobrados como si se tratara de tecnología de última generación.
Por lo que toca al sector salud, eres chismoso y ladrón y lo sabes, tanto como que el Seguro Popular no ha sido más que un botín, del que echas mano de recursos millonarios que trasladas a la satisfacción de tus intereses personales y de familia. Existen denuncias ante la Procuraduría General de la República que lo acreditan.
En tu personalísima agenda, la agenda de un desquiciado mental, eres el más entusiasta promotor de la legalización del consumo de la mariguana, como si el asunto no acusara riesgos criminales y de locura; lo que se mira en televisión sobre las sociedades enloquecidas por la legalización tramposa del enervante, no es más que publicidad, porque la realidad es distinta.
El particular llama mi atención, porque estoy seguro que tu interés en el tema tiene que ver con el gigantesco tiradero de agua de cultivo que promoviste e instalaste en Tequesquitengo, denominado Jardines de México, en donde no se requiere ser advino que la vocación turística, cambiará a la de cultivo de mariguana, para seguir ganando dinero, muchísimo dinero a costa de la salud y o el bienestar de los morelenses.
De tu aspiración presidencial Graco, ni siquiera abordo el tema, porque no tiene caso, tú como muchísimos morelenses y algunos mexicanos, sabemos que es una vacilada, que tus posibilidades son tan escasas en el PRD, del que eres esquirol, como también tan amplias de que termines comprándola en algún partido parásito, como por ejemplo, el Movimiento Ciudadano.
Para estar a tono con el luto causado por la muerte del cantautor Alberto Aguilera, Juan Gabriel, retomo parte de un de un par de sus composiciones más populares: Ya no te hagas, ni hagas más daño y aquella que con una altísima carga de verdad dicta: Dios perdona, pero el tiempo a ninguno.
Graco en Morelos no haces falta, tu presencia es altamente corrosiva.
Pedro Martínez Serrano
Periodista Independiente