Las candidaturas del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) serán definidas por el Comité Ejecutivo Nacional el 19 de diciembre, con base en consensos o encuestas, teniendo ya varias propuestas entregadas por la delegación en Quintana Roo.
José Luis Pech Várguez, delegado con funciones de dirigente estatal, señaló que aunque hay quienes se han acercado directamente a los organismos nacionales, recibieron la petición de algunas propuestas para candidaturas, las que ya entregaron, con hasta cinco nombres en algunos casos y solamente uno en otros.
Aunque no quiso dar nombres, señaló que son los que han trabajado, pero tampoco negó que su nombre estuviera incluido.
Pech defendió la abundante publicidad en volantes con la imagen de Omar Sánchez Cutis, coordinador del Distrito 1 que también estaba presente en la conferencia de prensa, señalando que no son actos anticipados de campaña, pues se invita a una “campaña de afiliación”
“Sí sale su cara, para que lo conozcan, y su número, pero para afiliación; no es un acto de campaña, aunque habría que verlo”, admitió.
Sobre la salida de Salvador Ramos, que forma su propio partido (MAR), el delegado dijo que puede haber militado, pero que nunca lo vio trabajando. “Vi a su yerno (Rafael Quintanar) participar fuertemente y luego traicionar e irse a otro lado; y a su hijo (Emiliano Ramos) todos lo vemos como legisla, totalmente a favor del gobierno”.
Descartó alguna impugnación, pues dijo que los de Morena son pocos y no pierden tiempo peléandose con el árbitro, porque son acciones innecesarias.
“Vemos el desgaste que tienen ante la opinión pública las autoridades electorales, es una pérdida de tiempo ir a reclamar, por ejemplo, el reparto de despensas del Verde, porque finalmente encuentran que no atenta contra la democracia” explicó. “No hay que pelearse con el árbitro, sino cuidar las casillas”.
Acompañado de Anahí González, coordinadora del Distrito 3, calificó con un 4 al desempeño del Gobierno del Estado en su primer año, pues dijo que redujo en un 54% el presupuesto en obra pública y, en cambio, lo amplió para el Congreso del Estado y el Poder Judicial, lo que no fomenta al crecimiento económico.
Se proclamo inconforme ante los avances presentados en la Reforma Electoral, pues los legisladores recortaron el periodo de los diputados, pero en dos legislaturas a futuro, para no afectar su periodo de reelección.
También permite, siguiendo el criterio de la Suprema Corte, a los presidentes municipales hacer campaña sin separarse del cargo, algo que es válido en países avanzados, pero no en México, donde se usan recursos públicos para realizar proselitismo.