(Animal político).- Los abogados de Duarte indicaron que no hay pruebas de que el exgobernador haya ordenado los desvíos; PGR respondió que la defensa del exmandatario trata de minimizar el tema.
El grupo de abogados defensores de Javier Duarte solicitó que no se abra un juicio en contra del exgobernador de Veracruz, tras considerar que las acusaciones en su contra son “patéticas” y que no hay una sola prueba que acredite que él fue quien ordenó el desvió de dinero.
De acuerdo con el abogado de Javier Duarte, Marco Antonio del Toro, la acusación es “patética” ya que en la audiencia inicial del caso los fiscales de la Procuraduría General de la República (PGR) solo explicaron el desvío de 38.5 millones de pesos y en la audiencia de este sábado traen unos gráficos que muestran una cifra de 1,650 millones que “no tiene justificación alguna”.
Al exponer su caso, el abogado de Duarte insistió en que la PGR acusa al exogbernador del delito de lavado de dinero sin explicar cómo se desviaron los recursos.
Al hablar sobre el testamento de Moisés Manzur, quien le dejó todo al exmandatario, Del Toro dijo que ese testamento se hizo en 2006 y que se anuló tres años después.
También acusó que la PGR no les dio las declaraciones de los testigos clave del caso en un disco sino que las tuvieron que conseguir con los abogados de Guatemala.
La PGR responde a los abogados de Duarte
Tras escuchar los argumentos de los defensores de Duarte, los fiscales de la PGR señalaron que “lo verdaderamente patético es ver a la defensa litigar en una sala de juicio oral usando como argumento reglas del sistema penal acusatorio”.
A decir de los fiscales, los abogados de Javier Duarte no trata de desmentir el desvío millonario, sino que buscan minimizarlo “como si 38 millones fuera cualquier cosa para el pueblo de Veracruz”.
“La defensa pretende litigar con falacias administrativas y con doctrinas”, declaró uno de los fiscales, quien señaló que se trata de una investigación abierta, por lo que todavía no se conocen las cantidades exactas del dinero desviado y que incluso podría haber más personas involucradas en el caso.
Peticiones negadas
Previo al primer receso de la audiencia, los abogados del exgobernador de Veracruz Javier Duarte hicieron tres peticiones, mismas que rechazó el juez.
Acompañado por seis abogados, Javier Duarte se presentó en punto de las 10:00 horas de este sábado en la sala de audiencias, donde lo esperaban seis agentes del Ministerio Público y un representante de la Secretaría de Hacienda.
El primer fracaso para la defensa de Javier Duarte ocurrió cuando trataron de que el representante de Hacienda fuera retirado de la audiencia, bajo el argumento de que no se trataba de una víctima.
El juez rechazó la solicitud de los abogados del exgobernador, al señalar que la Secretaría de Hacienda es una parte coadyuvante en el caso.
Hoy segunda audiencia clave del caso de Javier Duarte: o lo procesan o se va a su casa.
El segundo traspié en contra del exmandatario fue cuando su defensa intentó que el testimonio del exabogado de Javier Duarte, Alfonso Ortega López, quien aceptó colaborar con la PGR a cambio de no ser procesado, fuera eliminado.
La defensa del exmandatario argumentó que no le entregaron una declaración completa, sino que solo cuenta con una versión estenográfica y que el testimonio es ilegal porque no se justifica que sea testigo colaborador de acuerdo con la ley.
En respuesta a esta petición, el juez explicó que era necesario presentar el testimonio como prueba y que él decidirá después si tiene validez o no.
Otra de las peticiones de los abogados de Javier Duarte que no prosperó es que solicitaron que se interrumpiera el testimonio de Alfonso Ortega, con el argumento de que se estaba leyendo durante la audiencia.
Ante esto, el juez volvió a negar la petición al señalar que él desconoce lo que declaró Alfonso Ortega, por lo que la única forma de saber es que lo lean los fiscales de la PGR que participan en la audiencia.
Alrededor de las 13:15 horas de este sábado, la segunda audiencia en contra de Javier Duarte tuvo un receso de 15 minutos, luego de que inició a las 10:00 horas y, de acuerdo con el juez, se estima que se prolongue alrededor de 12 horas.
Tras el receso, se continuará con la lectura de pruebas.