Gran extrañeza y desconcierto entre funcionarios de primer nivel del Ayuntamiento de Benito Juárez causó la ratificación de Juvenal Reyes Marrufo en la dirección de Tránsito; ello, debido a que apenas unas semanas antes, este uniformado persiguió en su vehículo al actual director de Turismo y lo encañonó con su arma.
Este preocupante incidente, aunque se había mantenido oculto de la opinión pública, corrió como reguero de pólvora entre los principales personajes de la administración pública municipal, que vaticinaban que con ello Reyes Marrufo había puesto un abrupto final a su regreso en Tránsito. Para sorpresa de muchos, no fue así.
El director de Tránsito anteriormente se ha desempeñado como alcaide de la Cárcel de Cancún, asesor jurídico del exedil Gregorio Sánchez Martínez y posteriormente director del Centro de Retención Municipal (conocido como “El Torito”), antes de ser nombrado en su actual encargo hace unos meses, mismo que fue ratificado el pasado fin de semana, en el arranque del nuevo gobierno municipal.
En tanto, Frank López Reyes, miembro del gabinete municipal, es además hijo de Francisco López Mena, nuevo secretario de Gobierno de Carlos Joaquín, lo que no evitó que fuera impunemente encañonado por Juvenal Reyes.
Fue el pasado viernes 9 de septiembre, cuando altos funcionarios del gobierno municipal, además de amigos y empresarios, se dieron cita, desde las 20:00 horas, en el salón de eventos “El Dorado”, ubicado sobre la avenida Huayacán. De acuerdo a varias fuentes consultadas, el motivo era despedir el trienio de Paul Carrillo de Cáceres, que estaba a punto de concluir.
Todo transcurrió en normalidad, con integrantes del gabinete de Benito Juárez compartiendo anécdotas, otros enterándose de los cambios inminentes y unos más ya alistando estrategias para lo que estaba por venir. Aquellos que sabían que repetirían en sus cargos o serían cambiados de áreas simplemente sonreían.
Aproximadamente pasada la una de la mañana, cuando el festejo estaba llegando a su conclusión, Juvenal Reyes Marrufo, ya con varias copas encima, tuvo un altercado verbal con el director municipal de Turismo, Frank López Reyes, que fue subiendo de tono con rapidez.
Cuando las cosas se pusieron ríspidas, varios de los presentes decidieron intervenir y separaron a los dos funcionarios, aconsejando por separado a Frank López que se retirara del lugar, ya que Juvenal Reyes, le advirtieron, tiene mala fama de comportarse de forma agresiva.
A regañadientes, el titular de Turismo hizo eso, en compañía del notario público 39 de Cancún, Camilo Cámara Reyes. Lo que no esperaban ambos es que, iracundo, Juvenal Reyes partiría en su persecución en otro vehículo, que conducía de manera temeraria y que aventaba en contra de su blanco, todo a lo largo de la avenida Bonampak.
Finalmente, cuando eran ya cerca de las 2 de la madrugada, Juvenal Reyes le cerró el paso al vehículo de Frank López, en el kilómetro cero de la ciudad. Allí, descendió de su vehículo, desenfundó su pistola, cortó cartucho y amenazó con ella al director de Turismo, a través del vidrio del automóvil.
Frente a varios testigos, entre ellos Jaime Ongay Ortiz (entonces jefe policiaco de Benito Juárez y hoy director de la Policía Municipal de Isla Mujeres) y Gerardo González Núñez, alias “El Zombie”, director administrativo de la policía cancunense, Juvenal Reyes Marrufo profirió toda una serie de insultos en contra del director de Turismo, mientras lo mantenía encañonado con un arma, antes de desistir y permitir que se fugara en su carro.
Acto seguido, frente a los reunidos, propuso continuar con la fiesta, en el bar “El Muellecito”, ubicado a corta distancia sobre la avenida Bonampak. Allí acudieron diversos integrantes de las fuerzas policiacas a terminar la velada, en este local que, irónicamente, es propiedad de Frank López Reyes, minutos después de ver cómo el director de Tránsito lo había ahuyentado a punta de pistola.
Posteriormente, al correr la noticia de este ataque a un miembro del gabinete, varios directores del Ayuntamiento suponían que con el inminente cambio de gobierno, Juvenal quedaría fuera de la Corporación, pues además de lo reprobable del hecho en sí, con esto quedaba patente su temeridad y prepotencia.
Frank López Reyes, cabe reiterar aquí, es hijo de Francisco López Mena, nuevo secretario de Gobierno estatal, hecho de sobra conocido por Juvenal Reyes, lo que no impidió que le cercara el paso en su vehículo y lo encañonara para amenazarlo de muerte.
“Si así se comporta con el hijo del secretario de Gobierno, ¿qué le espera a un ciudadano común?”, cuestionó una fuente, quien pidió que se omitiera su nombre, por temor a represalias ( Fuente Quequi).
Pues todo parece indicar que en el municipio se necesita ese tipo de personalidad, como las PERRAS BRAVAS, que hasta a los de casa MUERDE, y háganse a un lado cuando lo vean venir, porque no se responde si hay chipote con sangre sea hijo de quien sea.