Por Enrique Huerta
El próximo gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, recibirá un gobierno técnicamente quebrado, hundido en una crisis financiera y administrativa, informó Francisco López Mena, coordinador general del equipo de transición del nuevo gobierno.
“Recibiremos un gobierno técnicamente quebrado: los gastos son mayores que los ingresos”, afirmó en una conferencia de prensa en la casa del equipo del próximo gobernador, en Cancún.
Con un rostro que trataba de denostar cierta tranquilidad ante el gris panorama en el que deja sumergido al estado el gobernador Roberto Borge, López Mena dijo que la entidad cuenta con un hondo déficit de operación de la administración pública.
“El déficit de operación, es decir, la diferencia entre los ingresos y los egresos es de 2 mil 700 millones de pesos”, explicó.
Asimismo, López Mena informó que Quintana Roo cuenta con una deuda pública excesiva, que ha cancelado la posibilidad de conseguir recursos adicionales.
“La deuda corresponde a dos elementos: el primero es a corto y a largo plazo. El de a largo plazo es de 19 197 millones de pesos, la de corto plazo es de 2 mil 421 millones de pesos”, detalló López Mena.
Este endeudamiento excesivo, dijo, ha cancelado la posibilidad de conseguir recursos adicionales.
“La imposibilidad de acceder a fondos federales de programas tan importantes como los que apoyan a campesinos, indígenas o emprendedores, debido al incumplimiento en las aportaciones estatales, o bien, en asuntos que ponen en riesgo funciones tan estratégicas para el desarrollo del estado como lo es la promoción turística”.
Todo ello ha ocasionado que Quintana Roo tenga mala calificación crediticia y operativa, lo que “nos coloca en desventaja para la búsqueda de fuentes de financiamiento públicas y privadas”.
“Estamos recabando el total de la información, y a la vez estableciendo las estrategias para revertir esta situación, con acciones como la revisión en la asignación del gasto, la definición de programas estratégicos para reorientar la inversión, un estricto programa de austeridad y la negociación con el gobierno federal para que nos permita cumplir con las obligaciones contraídas financieras, en la medida de lo posible”.
En cuanto a los aspectos administrativos, López Mena destacó que desde el 1 de septiembre, que dio inicio el proceso formal de entrega-recepción, no se ha dado intercambio de información oficial, aunque los enlaces del equipo de transición destacan un desorden administrativo en el gobierno encabezado por Roberto Borge.
Mencionó que existen dependencias en las que hay nombramientos recientes de los titulares y, por lo tanto, existe desconocimiento de la situación de la dependencia, como es el caso de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, de la Secretaría de Trabajo o de organismos como la Procuraduría de Protección al Ambiente o la Comisión para la Juventud y el Deporte de Quintana Roo, el Instituto Quintanarroense para la Mujer.
También aseguró que en la mayoría de las dependencias hay malas condiciones en las oficinas y se advierte carencia de insumos para laborar.
Otro punto que alarmó al equipo de transición de Carlos Joaquín son las numerosas fallas en la nómina del gobierno estatal, como que no hay una sola consolidada, que su captura es parcial y fragmentada, así como de la existencia de más de un sistema. Es decir, no existe una sola base que integre toda la información.
Tampoco ha habido una auditoría de nómina que permita corroborar la relación servidor público-función pública y hay grandes disparidades en la asignación de compensaciones en personas con un mismo nivel.
Es más, dijo López Mena, “no sabemos cuántos servidores públicos hay en el estado; no sabemos cuántos de ellos realmente trabajan. No sabemos cuántos dependen de nómina federal y trabajan en instituciones del gobierno del estado”.
Y agregó: “Muchos de los aspectos que estamos dando cuenta imnplican violaciones a las normas, alginas podrán ser de carácter penal, otras posiblemente no lo sean, pero esa será materia una vez que comience el gobierno de Carlos Joaquín, una vez que termine el proceso de entrega-recepción y se cuente con todos los datos con los que se deben de contar”.
López Mena reiteró que el gobernador electo aplicará la ley sin reserva ni condiciones.
Por su parte, Juan Vergara, coordinador del eje de finanzas del equipo de transición de Carlos Joaquín, detalló que el análisis concierne a los datos recabados del 1 de septiembre, día en que se inició el proceso de entrega-recepción, al día de ayer.
Hay esperanza
En la conferencia de prensa, el coordinador general del equipo de transición de Carlos Joaquín, Francisco López Mena, aseguró que la nómina del gobierno estatal no está en riesgo, que se pagará a tiempo a los trabajadores, y aseguró que tampoco habrá despidos por la austeridad que se llevará a cabo.
“No hay riesgo en ninguno de ese tema”, acotó.
Por su parte, el responsable del tema financiero del equipo, JuanVergara, dijo que todavía hay esperanzas para enderezar el barco de la administración pública de Quintana Roo, pero que se necesita de buenas prácticas administrativas.
“Nosotros tenemos la operación de un gasto corriente y de los ingresos a los que pertenece, a la naturaleza del estado, que son los que la Federación le hacen llegar, para ello sumamos 19 mil 702 millones de pesos, que si nosotros con buenas y mejores prácticas administrativas, que es lo que ha sido un común denominador que hemos identificado, vamos a poder mejorar 2 152 millones de pesos”.
Vergara dijo que ese ahorro de 2 mil 152 millones de pesos es suficiente para poder operar el gobierno estatal.
“Es muy complicado, pero lo vamos a lograr”, aseguró.
seria muy bueno que inspeccionaran las dependencias sobre todo donde Borge puso a trabajar a sus reynitas de belleza y edecanes estrellas es vergonzoso que gente sin siquiera nivel medio gane y tenga compensaciones mas altas que un verdadero profesionista solo por ser una amiguita o consentida del cinico gobernador