noticias09 de mayo del 2016
“URGE UNA CONTRALORÍA CIUDADANA EN EL MUNICIPIO DE TULUM” JPM
Como parte de la campaña para gobernar que ha mantenido el candidato a presidente municipal por la coalición Una Nueva Esperanza, Jorge Portilla Manica, se reunió con empresarios de Akumal, a invitación de éstos, para conocer cuáles son los 5 principales problemas a atender en la próxima administración municipal 2016 – 2018.
Con la única propuesta con visión de futuro en esta contienda electoral, integrando la Agenda del Futuro de Tulum con las opiniones y participación activa de los tulumenses, Portilla Manica escuchó los planteamientos de cansancio y hartazgo social, sobre la falta de servicios públicos como el drenaje sanitario; la inseguridad; la falta de simplificación administrativa para trámites y servicios. Sin embargo, en votación directa por los asistentes a la reunión, se considero que los problemas prioritarios están vinculados con la impunidad y la corrupción. Por ello, estos empresarios solicitaron al candidato la creación de un observatorio ciudadano en donde se verifique el manejo adecuado de los recursos públicos.
“Mi compromiso con la ciudadanía es que las decisiones que atañen al desarrollo, crecimiento y problemas del municipio, deberán de ser tomadas de manera conjunta es decir con el apoyo de las habitantes que conocen la problemática que afecta a Tulum”, aseguró Portilla Manica.
A su ves aseguró “que el Compromiso Ciudadano por el Tulum del Futuro, contempla en su primer eje estratégico, la instauración de un gobierno eficiente que promueva la participación active de los ciudadanos en la conformación de una Contraloría Ciudadana que revise y atestigue el uso y manejo de los recursos públicos, así como la actuación de los funcionarios de gobierno”.
Portilla reiteró que parte de la desconfianza de los tulumenses en su gobierno es por el mal uso de los recursos, prueba de ello es que todos los ingresos por concepto de participaciones federales, más de 191 millones de pesos que recibe el municipio, se van en sueldos y viáticos de los funcionarios, y dejan de lado la atención de los problemas prioritarios de la gente.
